El 12 de mayo de 1996, Carlos “Chiquito” Bossio metió un cabezazo histórico para darle el empate a Estudiantes de la Plata frente a Racing, 1 a 1 en el “Cilindro” de Avellaneda. Fue el primer arquero en convertir un tanto de una jugada en el fútbol argentino.
Parece común ver a los arqueros corriendo desesperados en la última jugada del partido en búsqueda del gol del milagro. ¿Cuándo fue la primera vez que alguno lo logró en un fútbol tan duro como el argentino? “Chiquito” Bossio fue el pionero en la Era Profesional, ya que un 12 de mayo como hoy pero de hace 23 años, entró en la historia cuando cabeceó como un delantero y empató sobre la hora contra Racing.
Corría la novena fecha del Clausura de 1996, cuando Estudiantes peleaba por el primer puesto con Lanús y le tocaba enfrentarse a Racing. La “Acadé”, en su cancha, se puso en ventaja con gol del “Lagarto” Fleita y se aferró a esa ventaja mínima. Los “Pinchas” no podían igualarlo en una tarde casi sin emociones en las dos áreas y no se cansaban de probar suerte cada vez que se encaminaban hacia el arco rival. Era necesaria una victoria para no perder el primer puesto y los dirigidos por Daniel Córdoba lo intentaron hasta el último minuto.
Fue en la última jugada cuando Bossio entró en la historia. El “Chiquito” dejó sus guantes por unos segundos para vestirse de un delantero más en el área de Racing, defendida por Ignacio González. Con sus casi dos metros, el arquero del Pincha le ganó a los defensores de la Acadé e incluso a Palermo, la referencia que buscaba Marcelo Couceiro en el corner. El cabezazo que empató el encuentro 1 a 1, le devolvió el respiro a los “pincharratas” y se convirtió en una fecha histórica ya que por primera vez un arquero hacía un gol de jugada en el fútbol argentino.
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