0 5 mins 4 años

La única mujer en ganar las 24 Horas en el mítico circuito donde dio más de 30 mil vueltas. Sabine Schmitz venció dos veces en la clásica competencia del Infierno Verde y fue campeona alemana de carreras de larga duración.

Sabine Schmitz (51) nació en Aldenau, una localidad situada al oeste de la región alemana de Eifel. Hija de hosteleros creció prácticamente en el interior del Circuito de Nürburgring, donde se situaba el hotel donde trabajaba su familia, en el pueblo de Nürburg. Como no puede ser de otra forma, su pasión por las carreras, después de tantas jornadas oliendo la gasolina, viviendo el ambiente y escuchando los ensordecedores motores de vehículos de altas prestaciones, no tardó en aflorar y la sentó tanto a ella como a sus hermanas al volante de coches de carreras, aunque ella llegó a convertirse en profesional. En una de sus entrevistas llegó a confesar que su primera vuelta fue en bicicleta y, después, con el coche de su madre que ‘tomó prestado’.

Desde muy joven compaginó sus estudios en hostelería, y posterior regencia de un restaurante en la misma zona, con la competición en el Nordschleife. En este peculiar e histórico trazado, donde la F1 y otros campeonatos de altísimo nivel han librado maravillosas batallas a lo largo de la historia, ya solo se disputan una serie de pruebas de resistencia, como son las VLN (campeonato que se celebra allí íntegramente) o las 24 Horas de Nürburgring. Sabine triunfó en todo lo que podía triunfar.

En 1996 y 1997 logró la victoria en las 24 Horas de Nürburgirng al volante de un BMW M3, y en 1998 se proclamó campeona del VLN. En ambos casos fue la primera mujer en hacerlo. Sabine compaginó su labor como piloto con la de “ring taxi” de un BMW M5 en el largo circuito de 20,8 kilómetros, formó su propia empresa de formación en el circuito alemán y se hizo famosa por el alto nivel de experiencia que, durante años, había acumulado en el “Infierno Verde”.

De hecho, ella misma llegó a decir que había completado más de 30.000 vueltas (o 600.000 kilómetros) al Circuito de Nürburgring, lo que hizo que se le asignara el apodo de “Reina de Nürburgring”. Su popularidad le llevó también a la televisión y a participar en programas como “Top Gear”, donde completó la vuelta a Nürburgring con distintos coches Además, llegó a ser copresentadora de la nueva etapa del programa. También apareció en diferentes programas alemanes, como «D Motor», donde realizó una serie de demostraciones en el Nordschleife con varios vehículos.

Unas de sus últimas apariciones en competición datan de 2015 y 2016. La piloto alemana fue invitada por el Mundial de Turismos a participar en la carrera organizada en el Circuito de Nürburgring. A pesar de ser su debut en el campeonato, puntuó en las dos primeras carreras de cada año. También en 2016 compitió por última vez en las 24 Horas de Nürburgring con un Porsche 911 GT3 de Frikadelli Racing, equipo que fundó junto a su marido, Klaus Abbelen.

La Reina de Nürburgring, o la taxista más rápida del mundo, como también se le conocía, nos ha dejado el 16 de marzo, después de cuatro años de batalla contra el cáncer que se le detectaron en 2017. “El Nürburgring ha perdido a su piloto de carreras más famosa. Sabine Schmitz ha muerto demasiado pronto después de una larga enfermedad. La echaremos de menos a ella y a su carácter alegre. Descansa en paz, Sabine”. Así se despedía de ella el Circuito de Nürburgring, su peculiar ‘oficina’ de trabajo y el lugar donde más feliz fue.

Fuente: www. autobild.es

Foto: Frikadelli Racing/Porsche/WTCC

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *